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Emanuel, Dios con nosotros, ponemos nuestra mirada en ti, en un mundo en el que todo parece incierto e inseguro.
Gracias porque no eres distante. Eres Emanuel, Dios con nosotros.
Consejero maravilloso, trae tu sabiduría y dirección a nuestros gobiernos, mientras toman decisiones desafiantes que impactarán naciones. Muéstrales cómo proteger y apoyar a todas las personas; los más ricos y los más pobres, los más jóvenes y los más mayores. Tú eres el Consolador maravilloso que sostiene y guía.
Gracias porque no eres distante. Eres Emanuel, Dios con nosotros.
Dios poderoso, invitamos a tu poder a moverse a lo largo y ancho de nuestro mundo. Que las vacunas que salvan vidas estén disponibles rápidamente en todo el mundo. Da capacidad sobrenatural a los sistemas sanitarios de nuestras naciones. Eres el Dios poderoso que trae sanidad y vida.
Gracias porque no eres distante. Eres Emanuel, Dios con nosotros.
Padre eterno, acércate hoy a aquellos que tienen Coronavirus. Sé su consuelo en el cansancio, y su fuerza en la debilidad. Y a los que lloran y están de luto por la pérdida de un ser querido, dales tu consuelo y apoyo cariñoso. Tú eres el Padre eterno que no se aparta.
Gracias porque no eres distante. Eres Emanuel, Dios con nosotros.
Príncipe de Paz : guarda nuestros cuerpos y nuestras mentes de la ansiedad y el temor que trae la incertidumbre actual. Te pedimos que tu poderosa paz y tu amorosa presencia estén a nuestro alrededor y dentro de nosotros. Eres el Príncipe de Paz que nos rodea y nos protege.
Gracias porque no eres distante. Eres Emanuel, Dios con nosotros.
Mientras nos acercamos a la celebración de tu nacimiento, Jesús, hoy esperamos en ti. Tú eres el Dios que vino a nuestro mundo a salvar.
Emanuel, estás con nosotros.