La misión no es una actividad que realizamos, es una forma de vida. Cuando conectamos con Dios en la oración nos vemos impulsados a salir al mundo, alimentados por el deseo de ver la transformación y vivir de forma contracultural. La oración es siempre el lugar de nacimiento de la misión: una llamada a vivir como seguidores de Cristo en el mundo que nos rodea, haciendo brillar nuestra luz más allá de la sala de oración.
Por eso hemos enviado equipos misioneros a servir junto a las Comunidades 24-7 en todo el mundo. Cuando servimos a los demás, Dios hace algo en nosotros que afecta la forma en que vivimos el resto de nuestras vidas.
El tipo de oraciones que tienen lugar en nuestra comunidad local, desde hacer una caminata de oración por tu área local hasta orar por gente que te encuentras en la calle. Disponemos de una colección de ideas que te equiparán e inspirarán para llevar tus oraciones a las personas que tienes cerca.
Conoce nuestras comunidades en todo el mundo, que buscan marcar la diferencia en la vida de quienes les rodean.